Tres guerreras, dos modalidades y una única pasión


Las tres chicas que os presentamos a continuación comparten tres historias que no tienen nada que ver entre ellas, mientras Dolors Ros compite en Velocidad, Alba Vilaplana lo hace en Tria ly Ainoa Forcada se divierte rodando, pero las tres tienen algo que les une, su pasión por las dos ruedas.

 

Dolor Ros:

Nuestra primera protagonista se aventuró a iniciarse en la competición en el año 2010 para disputar cinco de las seis carreras de la Copa Féminas del Campeonato Castellano Manchego. Casi no tenía experiencia, ya que hacía tan solo tres años que se había sacado el carnet y no había cogido nunca una moto, ni pequeña ni grande, y en circuito tan solo había entrado anteriormente 3 o 4 veces y siempre había sido el mismo.

 

Pero a pesar de aventurarse las cosas no fueron tan mal ya que en sus carreras disputadas en circuitos como Albacete, Catellolí, Motorland o Navarra, realizó una gran actuación, y aunque los tiempos por vuelta no acabaron de acompañar, en todas y cada una de ellas adquirió mucha experiencia al mismo tiempo que aprendió a manejarse sobre la moto. Finalmente, gracias a su constancia, en la clasificación final consiguió obtener una meritoria quinta plaza.

 

Después de esa buena temporada, entre los años 2011 y 2013, la economía no le permitió poder disputar un campeonato completo, por lo que decidió formarse como piloto. Para ello escogió la opción de dedicarse a realizar rodadas con el objetivo de mejorar muchas cosas sobre la moto y sobre todo sus tiempos por vuelta.

 

De cara a esta nueva temporada su intención es continuar haciendo rodadas, y de este modo seguir adquiriendo muchos más conocimientos y perfeccionando la técnica. Además espera encontrar un soporte económico ya que le encantaría disputar la Copa Rodi o algunas carreras del Campeonato Catalán, para de este modo poder medirse con rivales reales y poder poner en práctica todo lo aprendido. También cabe destacar, que se presentó a las pruebas de selección de la Z Cup donde el resultado no fue del todo mal, pero finalmente no fue escogida.

 

Sin duda alguna podemos decir que Dolors empezó la casa por el tejado, ya que la mayoría de pilotos primero se inician rodando y entrenando para posteriormente dar el salto a la competición, pero no hay duda que durante estos años ha podido disfrutar de lo que le apasiona y al mismo tiempo formarse en ello para día a día poder mejorar.

Alba Vilaplana:

Nuestra segunda protagonista es Alba Vilaplana, una joven que a los cuatro años, gracias a su padre se subió por primera vez a una moto, y a pesar de que este primer contacto fue sobre una moto de trial, después decidió ir cambiando de modalidad para finalmente decantarse por el enduro.

 

Desde ese primer contacto, a pesar de los cambios de modalidad, Alba tuvo claro que lo que le apasionaba eran las dos ruedas, por lo que siempre que tenía la oportunidad de hacerlo se subía sobre una moto. Pero no fue hasta 2013 cuando decidió empezar a competir. Primeramente probó con una prueba de la Copa Catalana de Enduradas, donde vio que podía con sus rivales, ya que consiguió finalizar en una fabulosa segunda posición. Eso y el buen ambiente hicieron que se decidiera a disputar el campeonato completo, donde obtuvo magníficos resultados y finalmente acabó en la segunda posición de la clasificación general.

Ainoa Forcada:

 

Ainoa Forcada es la última de nuestras protagonistas. En este caso ella se inició a los 12 años cuando le regalaron su primera moto, una Rieju 50cc, la cual consiguió después de pedirle insistentemente a su padre, una gran aficionado que nunca quiso introducir a su hija en este mundo.

 

Tras la Rieju dio el salto a una Metrakit 70cc, para posteriormente hacerlo a la de 125cc, pero siempre simplemente rodando, nada de participar en campeonatos. Unos años más tarde pensaron que era el momento de iniciarse en la competición, pero lamentablemente sucedió un accidente, en el que Ainoa se quedó inconsciente, y sus padres decidieron que era mejor que se apartara de la competición. A pesar de ello, poco a poco fue volviendo a rodar con su moto, para hace dos años dedicarse únicamente solo a su Honda 85cc, con las que ha realizado enduradas como el Enduroc, donde finalizó segunda el pasado año. Éste ha disputado la carrera de Bassella Race donde nuevamente ha sido segunda, y en Motorland Aragón ha conseguido ser primera.

 

Por el momento Ainoa está estudiando ingeniería mecánica, ya que quiere dedicarse a algo relacionado con las dos ruedas, y al margen de las carreras en las que participa, quiere realizar también la Copa Catalana de Enduraras y algunas pruebas como el enduro de Cataluña.

 

Por Nana Castillo.