San Cosme: La lucha contra la tuberculosis

El distrito del Cerro de San Cosme, en el centro de Lima, fue el escogido por la Fundación Repsol y el Dr. Xavier Mir como el punto de partida de sus acciones humanitarias coincidiendo con el paso del Dakar y, precisamente, en un lugar en el que la Madre Teresa de Calcuta residió durante un mes. Los miembros de la Fundación constataron en primera persona la importancia del material que se ha puesto a disposición de las gentes del Cerro de San Cosme en un acto muy emotivo.

 

El Cerro de San Cosme es uno de los barrios más necesitados de la capital peruana, en el que viven 20.000 habitantes en apenas tres km2 y en su Centro de Salud se hizo entrega del material sanitario para tratar la tuberculosis. El índice de esta enfermedad infecciosa en esta zona es el más alto de Sudamérica, con una tasa de incidencia de 1300 casos por cien mil habitantes.

 

Dr. Luis Alberto Fuentes Tafur (Subdirector General de la Dirección de Salud de Lima)

“Esta acción demuestra que en el mundo todavía existe un rincón para la solidaridad y siempre quedan personas para ayudar a los más necesitados. Este material significa para nosotros un valioso aporte para mejorar la atención de nuestros ciudadanos, sobre todo a las personas afectadas por la tuberculosis”.

 

Dr. Modesto Yupanqui (Coordinador de la Acción en Perú)

“Estamos muy agradecidos por esta ayuda a los más necesitados. La alegría y el agradecimiento de la gente que ha estado presente en el acto de donación me reconforta mucho más como ser humano que como médico”.

 

Sr. Jorge Hurtado (Repsol Perú)

“El compromiso de nuestra empresa en el ámbito social es muy elevado y éste es un nuevo ejemplo de ello desarrollado en una de las zonas más pobres del país. La Fundación Repsol intenta estar siempre donde más la necesitan y la importancia que tiene esta propuesta para la gente que lo recibe hace que no sea uno más de los muchos proyectos que tenemos en Perú”.

 

Dr. Xavier Mir

“El cariño recibido en el Cerro de San Cosme me ha demostrado el acierto de la acción, no solo por la importancia médica de la lucha contra la tuberculosis, sino por aportar una dosis de esperanza e ilusión a toda la gente que combate esta terrible enfermedad infecciosa”.

 

 

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